Introducción
Gametopia (@gametopia) es una compañía fundada en Madrid en 2005 que además de la creación de videojuegos (especializados en «narrativos») se dedican, como ellos mismo dicen, «a impulsar a una generación de creadores de videojuegos, programadores, guionistas, diseñadores, artistas, testadores, etc». Quién mejor que los que saben para enseñar a los que quieren aprender, y para ello imparten clases, «campus virtuales» y disponen de todo lo necesario para la enseñanza. Tienen un largo catálogo de juegos tanto para Windows como para Mac y móviles IOS y Android. (https://www.gametopia.es/)
La aventura que comentamos, que en un principio se quería llamar «Jules Verne: The Shape of Fantasy» (@vernegame) y que al final se quitó el nombre propio, tiene una historia algo singular y entretenida, pero aparte del juego en sí, si visitamos su página web nos encontraremos con un cómic en blanco y negro de cinco páginas sobre Hemera, un mundo paralelo, que vale la pena leer antes de comenzar a jugar, aunque esté en inglés.
La aventura tiene licencia comercial y la podéis encontrar en Steam al precio de 10,49 euros (ahora está con un 30% de rebaja del precio anterior, 14,99). Ahí mismo podéis también descargar una demo por si antes de pagar preferís enteraros bien de cómo va todo y probarla. Pero si preferís la opción de GOG (ejecución directa sin instalar), la tenéis en su página y aquí esta con un 25% de descuento, a 11,29 euros.
Los requisitos mínimos del juego son: Windows 7 o superior, procesador de 1,2 Ghz+, memoria de 1 GB de RAM y necesitamos un espacio de almacenamiento de 1 GB. Los que se recomiendan son: Windows 10, procesador de 2 Ghz+, memoria de 4 GB de RAM y necesitamos un espacio de almacenamiento de 1 GB.
Al ser una aventura tan nueva no hemos encontrado ninguna actualización importante y tampoco ningún número de versión. Esto dice mucho a su favor y que tienen un buen equipo de probadores, pero sí existe una actualización menor del 24 de agosto.
Las voces están en inglés, pero los textos se han traducido en varios idiomas: castellano, alemán, holandés, japonés, chino y coreano. Lo que, para nosotros, es importante ya que hay muchos diálogos y es necesario leerlo todo para entender bien la trama. Lo nos que lleva a pensar, de nuevo, cómo una compañía española no saca un juego todo en castellano, pero eso ya será otra historia de prioridades.
El juego ha sido subvencionado por la Unión Europea. Por un lado por Red.es y por otro por FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional).
Por último decir que, antes de jugarnos la aventura, miramos algunos comentarios en la red para saber dónde nos metíamos, de qué iba el juego y cómo lo consideraban en general. Pues bien, comprobamos que no hay término medio, o gusta o no. Unos se quejan de los gráficos en plan retro art y otros los consideran geniales. Igual pasa con las teclas de función, pues la mayoría prefiere el ratón al ser una aventura. O la música, que a algunos no les gusta lo clásico y no pintan nada las canciones y otros declaran que es lo mejor del juego. Incluso algunos destacan la «mala traducción» que ocurre en algunos casos, cuando está perfecta ya que son «términos marinos» que deben llevar su nombre verdadero. Cada persona es un mundo.
Ambientación
En principio estamos en la Tierra, pero en un mundo diferente, paralelo, que se llama Hemera, y que surge de la imaginación de Julio Verne. 
Un mundo steampunk de pixel art. Y este mundo está en guerra entre dos facciones, «La Nación» que supuestamente es la zona de Europa y que son los «malos de la película», y la otra parte, sin nombre, una «resistencia», que encabeza el Capitán Nemo y su Nautilus. Estamos en 1888 y hemos llegado a un punto crítico en que la guerra amenaza con destruir todo el planeta.
Siempre perseguidos por «La Nación», encabezando su ejército el navío Valquiria y capitaneado por el comandante Raven, el Capitán Nemo solo tiene un pensamiento: buscar la Atlántida y descubrir sus secretos, en especial un arma que podría cambiar el curso de la guerra, «La Llama de Hefesto», una poderosa energía atlante causa también de su destrucción.
Y es por ello que contacta con Verne y le hace partícipe de su búsqueda ya que sabe que otra arma imprescindible para ganar, el IMAG, «dispositivo atlante de alteración de la realidad», solo puede ser usada por el escritor. Verne acepta el viaje no solo por la aventura en sí sino también para poder erradicar la oscura y poderosa fuerza de la imaginación de todo el planeta y de su propia mente.
En definitiva, el guion es un poco liante pero muy ambicioso y que demuestra el gran conocimiento que tienen sus autores sobre la vida de Julio Verne y de otros autores de la época, con referencias a todos ellos, como Edgar Allan Poe. Es una información interesante y fácil de ir siguiendo, además de muy educativa.
Gráficos
Una de las frases de los creadores del juego en cuanto al apartado gráfico es «una experiencia narrativa pixel art. Hemos leído sus novelas y visto series o películas de este tipo (La Liga de los Hombres Extraordinarios o incluso Sherlock Holmes) y realmente cuando pensamos en 20.000 leguas de viaje submarino, la idea que nos viene es de este tipo de gráficos, llenos de detalles y algo decó».
Con una resolución de 1920 x 1080 y pantalla completa vemos los personajes muy bien definidos, estilizados, incluso se pueden ver los rasgos de sus caras.
Hay muchas animaciones, cortas y largas, también bien logradas y normalmente de finales de capítulos, con explicaciones que nos van poniendo en situación. Al ser a pantalla completa hace que tengan más valor los gráficos llenos de detalles y movimiento.
Jugabilidad
Es una aventura de las típicas clásicas de point & click, pero aquí todo se maneja con el teclado o un mando. No somos muy fans del sistema WASD, pero aquí encaja bien. El problema es que hay más teclas a usar y hasta que te acostumbras vas algo perdido.
El método de juego está dividido en siete capítulos (en realidad son nueve) y debemos ir resolviendo una serie de problemas en cada capítulo. O sea, que si no acabas uno no puedes pasar al siguiente. Lineal completamente. Deberemos ir avanzando cumpliendo estas misiones, hablando con los diferentes personajes y resolviendo los puzles.
La acción se realiza en scroll lateral a ambos lados por lo que, en principio, se hace raro ver las puertas de cara. Vamos a tener que abrir muchas y a nuestra opinión es que se deberían haber hecho un poco ladeadas, pero es solo una apreciación nuestra.
Una de las pegas para algunos, o no, es que tenemos que tragarnos muchos diálogos enteritos, sin poder saltárnoslos. En algunos disponemos de la tecla «Q» para que avancen rápido, pero en otros casos tenemos que leerlo todo. Lo mejor sería podérselos saltar, ya que si repites lo jugado por cualquier motivo tienes que tragarte el rollo otra vez.
La duración aproximada de la aventura, jugada con calma, leyéndolo todo y realizando los puzles es de unas 4 horas. Comentamos esto porque algunos puzles pueden desactivarse en el menú ya que sale un aviso en el momento de hacerlos.
Pulsando la tecla «ESC» pasamos al menú, que se divide en cuatro apartados. El primero es el normal donde encontramos las «Opciones» del juego. Tenemos «General» para el audio, el idioma y la pantalla, el de «Accesibilidad» para las fuentes, vibración, etc., y el de «Controles» donde se especifican las teclas a usar. Después tenemos tres apartados más que son como una especie de «álbumes de cromos»: «Bios», «Verne Log» y «Coleccionables». Son una especie de «Logros» y no es necesarios tenerlos todos para acabar la aventura.
En cuanto al juego en sí es todo a pantalla completa salvo en los «flashes» que ocupan el centro en tres cuartos. Los textos siempre salen en la parte inferior central y realmente no impiden ver los gráficos en ningún momento al ser más bien pequeños en comparación con la pantalla.
No existen conversaciones como tales, las que conocemos de otras aventuras donde mantenemos un diálogo. En este caso aparecen unos iconos con palabras y en pocos segundos deberemos elegir uno, casi sin tiempo para pensarlo. No ocurre nada si elegimos uno u otro porque todos nos informarán.
Dificultad
En un principio nos lía un poco tanto el funcionamiento del IMAG como las largas parrafadas que tenemos que leer para empezar a entender lo que pasa, pero en poco tiempo lo asumimos todo y se juega tranquilamente.
Los puzles no son muchos y la mayoría muy fáciles. Es verdad que a medida que avanzamos se van complicando, pero nunca nos quedaremos sin pasarlos. En algunos casos son simplemente sacar una ficha moviendo las demás para dejarle paso, o montar una escalera de cinco piezas, o buscar los colores para abrir una caja. Más adelante ya se complican, pero normalmente con pistas muy evidentes. En total habrá que resolver unos doce puzles.
También tenemos algunas zonas de «sigilo» que debemos pasar muy despacio entre soldados sin que nos pillen, pero que repetiremos un par de veces para saber su recorrido y luego las haremos sin problemas.
Sonido
Creemos que ha sido todo un acierto usar música clásica de grandes autores para acompañar la aventura. Son melodías muy bien elegidas en cada situación y acompañan perfectamente toda la estética general del juego, además de que hay una gran cantidad.
Por otro lado, hay que destacar todo el doblaje de los diferentes personajes de la aventura en unos diálogos no lineales. Aunque en inglés, han sido doblados por grandes actores, y puedes distinguir a cada personaje por su acento o su manera de expresarse. Es un gran trabajo que no todos los juegos tienen en cuenta.
Efectos de sonido también muy bien realizados y colocados en el momento justo y preciso. Cantidad y variedad. Mientras exploramos islas paradisíacas oiremos el sonido de los pájaros, las hojas, cascadas, o los animales correteando, y mientras estemos dentro del Nautilus escucharemos sonidos metálicos, de vapor o de tuberías.
